El cartílago de tiburón contiene proteínas, calcio, fósforo y mucopolisacáridos, que lo hacen un buen suplemento nutricional. Posee cualidades antiinflamatorias, analgésicas, estimulante del sistema inmunológico, inhibidor de la angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos), inhibidor del crecimiento tumoral.
Estas propiedades lo convierten en un aliado en el tratamiento contra el cáncer, que si se pueden discutir sus efectos benéficos, de todos modos, no posee contraindicaciones, siendo un buen complemento alimenticio.
Propiedades del cartílago de tiburón
El cartílago de tiburón tiene propiedades inhibitorias para el crecimiento tumoral y sus metástasis, también combate la artritis, la retinopatía diabética y el glaucoma vascular, la psoriasis, y las enfermedades inflamatorias de origen vascular.
El cartílago contiene sustancias como colágeno, sulfato de condroitina, carbohidratos complejos que se asocian con el colágeno. Esto le confiere cualidades para el tratamiento de enfermedades como el lupus eritematoso y la psoriasis. Los mucopolisacáridos resultan eficaces en el combate de afecciones reumáticas, son antiinflamatorios. Estimulan el sistema inmunológico.
Algunas de las enfermedades que pueden asociarse a la formación de nuevos vasos sanguíneos y que pueden combatirse con el cartílago de tiburón son: la psoriasis, la osteoartritis, la artritis reumatoide, la retinopatía diabética, el glaucoma neovascular, la enteritis, la degeneración macular de tipo exudativo, y el cáncer. Los tejidos más afectados por el desarrollo masivo de nuevos vasos, son: la piel, la córnea y el cartílago.
La razón por la que se ha estudiado el cartílago de tiburón reside en que este pez no enferma de cáncer. La aplicación del cartílago de estos peces a la nutrición humana, favorece la reducción de la aparición de metástasis en los pacientes con cáncer, debido a las proteínas que contiene, que inhiben la formación de nuevos vasos sanguíneos que limitan las posibilidades de formación de nuevos tumores.
Esta sustancia no posee efectos secundarios significativos. Sin embargo, está contraindicado en embarazadas, o mujeres que estén en periodo de lactancia, o quienes planean quedar embarazadas, debido a que impide la formación de nuevos vasos sanguíneos.
Tampoco se recomienda para menores de 12 años, para quienes están por operarse o durante el postoperatorio, o los que hayan sufrido recientemente un paro cardíaco, tampoco a los enfermos de litiasis renal, porque están en un proceso angiogénico natural que no debe interrumpirse. Esto incluye a personas que hayan sufrido importantes heridas. Está especialmente prohibido para los alérgicos al pescado.