Desde que las dietas y la vida natural se pusieran de moda, muchos son los alimentos que han sido promocionados como milagrosos, pero si bien tienen muchas cualidades buenas, es importante que sepamos distinguir entre el mito y la realidad. Tal es el caso del perejil, que de acuerdo a la creencia popular, sería una especie de comodín para la buena salud.
A este noble alimento se le adjudican algunas cualidades reales, pero otras no son realistas. Es cierto que en las hojas del perejil puedes encontrar vitaminas A, B1, B12, C y D. Pero lo que no suele mencionar, es que para que dichas vitaminas lleguen a tu organismo intactas, debes ingerirlas crudas, ya que la cocción hace que se pierdan casi en su totalidad. A pesar de ello, lo más común es utilizar el perejil cocido en los diversos platos. Pero ten en cuenta que su cocción debe ser superficial para que no pierda la totalidad de los nutrientes.
Entre las propiedades que se le atribuyen al perejil si lo preparamos en infusión está la de diurético, regulador de la presión arterial, mejorador del funcionamiento de la vejiga y también es utilizado como emenagogo (como estimulante de la circulación sanguínea en la zona pélvica y de la menstruación).
El perejil también es utilizado para aumentar la diuresis, facilitando la excreción de agua y sodio, aunque es factor de aumento de los niveles de potasio y su absorción.
También habrás escuchado que es bueno para eliminar pecas y manchas de la piel ocasionadas por el sol. Y esto es real, pero no esperes resultados instantáneos, porque como todo remedio natural, requiere de constancia y tezón. A esta función se agrega su poder antioxidante capaz de brindar un aspecto más joven a la piel.
Si lo consumes crudo, el perejil te aportará una serie de minerales indispensables para el buen funcionamiento del organismo: betacaroteno, fósforo, azufre, hierro y calcio.
De modo que si deseas recibir todos los beneficios de incluir perejil en tu dieta, te recomiendo que lo utilices crudo y si deseas mejores resultados, puedes licuarlo combinado con piña o pepinos, es delicioso y te aportará muchos más nutrientes.