Tendemos a creer que los accidentes de tráfico les ocurren a los demás, y nunca a nosotros. Aunque seamos prudentes en la conducción, todos estamos expuestos a sufrir un accidente cuando conducimos, sea por imprudencia o despiste de otros, o nuestro.
Como todo peatón y conductor está expuesto a sufrir un accidente de circulación, es necesario conocer los pasos que se deben seguir para no tener problemas con la compañía aseguradora propia o la contraria que deba satisfacer los gastos e indemnización.
Tras los instantes posteriores a sufrir el accidente
1º.- En el primer momento, tras sufrir el accidente, hay que mantener la calma, soportar el dolor de la mejor forma, y si los vehículos pueden moverse y se obstaculiza la circulación, moverlos a un lado de la carretera para permitir que los demás puedan avanzar. Así evitaremos accidentes múltiples y que nos puedan provocar daños los vehículos que vienen por detrás.
2º.- El segundo punto es comprobar el estado de salud de todos los ocupantes del vehículo. Si hay alguien grave, debemos llamar inmediatamente a la ambulancia.
3º.- Si el estado de salud no es grave, nos bajaremos para hablar con el conductor del otro vehículo o vehículos implicados, y así cumplimentar el parte de accidente. Casi todas las compañías de seguros cuando nos dan copia de la póliza nos entregan uno o dos partes de accidente para cumplimentar en caso de necesidad.
Rellenar el parte de accidente con calma, mirando todos los apartados y dejando claro quién ha sido el responsable y como se ha producido el accidente es fundamental para que las compañías de seguros no intenten eludir su responsabilidad. También es clave identificar los vehículos y los números de póliza de seguro. No olvides mirar el documento por el reverse y completar los datos que ahí pida.
4º.- Tras ello, sería importante también que realizaras fotografías de los vehículos implicados, así como del lugar del accidente, y las señales de tráfico.
5º.- Si cualquiera de los ocupantes se encuentra mal, tiene vértigos, dolores o cualquier molestia debe acudir a las Urgencias del hospital más cercano para que le hagan pruebas y emita el informe médico de urgencias.
Resto de actuaciones a realizar en días posteriores
En los días sucesivos, también se deben realizar una serie de actuaciones que eviten tener problemas en la posterior reclamación:
- Comunicar a tu compañía aseguradora la existencia del accidente, y darle traslado del parte de accidente.
- Llevar el coche a un taller mecánico para que lo perite un perito de la compañía de seguros y posteriormente lo arreglen a su costa.
- Buscar y asistir a una clínica médica, para que primero el traumatólogo te examine y mande las pruebas necesarias, y después hagas el tratamiento de rehabilitación que te mande.
- Buscar un abogado que te ayuden con las gestiones y reclamación.
En ocasiones, tu compañía aseguradora va a recomendarte clínicas y abogado. Debes saber que eres libre de elegir los que te recomiendan u otros de libre elección. Es más, en muchos casos esos que te recomiendan estarán sometidos a las directrices del seguro sobre todo económicamente, y por ello, puede que no satisfaga tus expectativas.
Si sigues todos estos pasos, no tendrás problemas en la reclamación y obtención de la indemnización que te correspondan al sufrir un accidente de tráfico.